29 de enero de 2017

villa de aragón

la gente se decepciona cuando me ve. piensan que he cambiado, que antes era mejor. o no sé qué piensen porque ni siquiera tienen la cordialidad de explicarme porque sólo se alejan o procuran hacerlo y dejan de hablarme. según yo, no me comporto de manera demasiado ofensiva o agresiva. no soy tan mala, creo. tampoco es que ahora sea una persona renovadísima, no es que haya alcanzado la iluminación ni nada. antes, me odiaba. aunque aún no me amo, he hecho las paces conmigo misma and shit y siento que ahora sí puedo establecer una conexión humana, que sí puedo tener una conversación sin morirme de ansiedad. sé que soy súper chafa todavía y probablemente lo sea hasta que me muera pero you know what: it's okay to be chafa (es una buena línea para una camiseta, háganme saber si comprarían una camiseta con esa leyenda para hacerla y venderlas afuera de la cineteca). es decir, de hecho me siento mejor que cuando tenía 20 pero las personas parecen no estar de acuerdo y siguen alejándose como si hubieran visto una película de jodorowsky: incómodos, confundidos, sin poder decir exactamente qué pasó pero definitivamente disgustados. y digo, no tiene nada de malo. yo he hecho lo mismo con algunos, todos tenemos derecho a comenzar a ignorar a la gente cuya actitud nos molesta, es de hecho la mejor opción porque también tenemos derecho a ser medio bitchy y molestos. está muy bien que me dejen de hablar, después de todo, he sido mala, lo merezco en cierta forma. de hecho, está todo bien. entonces pueden ignorar todo este post, hagan como si no existiera. sorry.

1 comentario:

Nicolás Díaz dijo...

yo compraría esa camiseta pero no voy a la cineteca